type='text/javascript'/> Mundo Playmobxx: Arizona Sur: poblando la Patagonia (¿?)

6.2.07

Arizona Sur: poblando la Patagonia (¿?)


Y fuimos a ver Arizona Sur, nomás; recordando a Casero haciendo del niño que no estudiaba en Cha Cha Cha con excusas del estilo “se cayó el tren donde viajaban mis padres y los cocodrilos se los comieron”, que se llamaba Capusotto y que tenía unos anteojos enormes; también fuimos porque Alan Pauls firmaba el guión.
Arizona Sur está montada sobre la idea de poblar la Patagonia. Un personaje mítico, actor del incipiento porno italiano de los años 50, se traslada a Argentina con el fin de embarazar mujeres feas, viejas, sin esperanzas de hijos. Así, ha creado una progenie de hijos sin padre, unidos por una característica común: los dedos del pie están unidos por una membrana de piel, como si fueran patos. Nazareno y su hermano, hijos de él, sin saberlo demasiado bien, comienzan a buscarlo luego de que su madre octogenaria y en estado catatónico queda embarazada.
Hasta acá, y contada de esta forma, la historia parece prometer una road movie con tintes de búsqueda existencial de identidad.
El tema es que hay que reconstruir un poco la historia para contarla así; la película es temporalmente caótica, con escenas que se repiten, con cabos desanudados y con un sinsentido que a veces no sabés si es generado concientemente en código absurdo o si es producto de escenas perdidas u olvidadas. La búsqueda del padre sólo produce que Awada (quien hace del semental italiano) cante ópera en un hospital, que desaparezca otra vez siguiendo las asentaderas de una cincuentona enfermera y que a Nazareno le crezca la barba.
En este código del absurdo, la película se hace más una serie de escenas sueltas que una unidad narrativa: una banda kusturikense toca en un camión mientras recorre la Patagonia – que, encima, no es la Patagonia aunque la sea - , a Casero casi se lo violan por las deudas de juego del hermano, la mística aparición de una chica de Acuario que produce la mejor cara de Casero en toda la película, casi la que estabamos esperando.

Fui feliz mientras estuve convencido de que Pauls era coguionista de Arizona Sur mientras intentaba disecar qué partes había pensado él y cuáles las otras. Por supuesto, le tocaban todas las buenas. Pero los créditos del final de la película son así: inapelables y sin posibilidad de interpretación.

4 comentarios:

Silvio Astier dijo...

Me dieron muchas ganas de ver ... cha Cha Cha !!! me voy a poner mis viejos videos que no le pienso prestar a nadie (no insistan). La escena de Naza en la escuela comido por los cocodrilos, es tan buena como cuando declaró que sus padres fueron comidos por los Indios cucacuma.

Sobervio. Sobre todo, encima.

Anónimo dijo...

Parece que las virtudes de autor de novelas no son las mismas que las de guionista. Una pena.

Anónimo dijo...

Sabe una cosa PH?,...si usted mira una flor, le devolverá una sonrisa.
Si quiere, otro día le cuento sobre los dos caminos...

Playmobil Hipotético dijo...

nadie: me lo presta?
mp: a veces temo que el pasado lo haya escrito otro...
sofia: no sé, yo acá estoy tratando de silbar todavía así que si encima hay dos caminos, no me voy a decidir nunca.